Duelo
Uno a uno, se arrancaron los pedazos de piel y quedaron expuestos entre sí. Cuando ya no quedó nada mas que carne ardiendo y sangre brotando por sus cuerpos débiles, vulnerables al frío de la desgracia dejaron de verse a los ojos, se soltaron de las manos, volvieron añicos sus corazones creyendo que así sobrevivirán al dolor. El cuerpo no arde, el corazón ya no duele; quedaba una sensación en el pecho que se hacía mas grande y mas insoportable al respirar...Se giró rápidamente pero solo logró ver una figura borrosa alejarse en el camino y se preguntó: ¿Cómo se arranca uno el alma?